27 marzo 2008

¡El castellano no viene del latín! (sic)






Bien, pues..., el castellano no viene del latín. Ahora ya estoy más tranquilo. Ya entiendo por qué nuestras autoridades educativas están empeñadas en hacer desaparecer de los planes de estudio esta disciplina abominable e inútil. Son lenguas tan distintas que su estudio convierte el latín sólo en un elemento pernicioso para nuestro alumnado, ya que le hace pasar horas y horas intentando descifrar una jerga extraña y sin sentido, con el único objeto de perpetuar el "coco" que tuvo que ser para quienes ahora diseñan las leyes educativas.
Curioso... Curioso que sólo conozcamos vestigios del latín escrito y a nadie se le ocurriera haber escrito hasta llegar al romance nada en ese "italiano antiguo". Curioso...

Contrariamente a la idea generalmente aceptada, el francés no viene del latín, como tampoco el italiano, el español, el rumano ni ninguna otra lengua romance proviene del latín. He aquí el resumen de la tesis que voy a demostrar.En los primeros siglos de la historia de Roma, dos pueblos, y por lo tanto dos lenguas, coexistían en el pequeño territorio del Lacio. Un pueblo hablaba latín y el otro hablaba italiano. Estos dos pueblos se fusionaron en uno solo. El italiano se convirtió en la lengua hablada y el latín permaneció como lengua escrita.

De esta manera, desde el siglo II antes de Cristo, los romanos eran bilingües: utilizaban el italiano como lengua hablada y el latín como lengua escrita, y son estas dos lenguas las que ellos aportaron a todas las regiones que conquistaron. Luego de la conquista romana, en Italia, en Francia, en España y en Rumania, los pueblos abandonaron sus lenguas respectivas para adoptar el italiano como lengua hablada y solamente utilizaron el latìn para escribir, tal como lo hacían los romanos...

Es verosímil pensar que los romanos llamaran a su lengua hablada el «romano». Para evitar cualquier confusión con el uso que hoy hacemos de este término, voy a llamar a la lengua hablada por los romanos “italiano antiguo”. Utilizo a propósito este término ya que los romanos no hablaban un latin deformado, llamado en ocasiones “latín vulgar” o “bajo latín”, sino que hablaban sencillamente otra lengua distinta, que no tiene al latín como origen, y que ya era una forma de italiano.



Eso sí... ¡qué modernos! Ya eran bilingües.

0 comentarios:

Edublog del Atrio © 2008. Sobre la plantilla original Sederhana, adaptada de Oh My Grid - WP theme por Thomas Arie